Partes de la inteligencia emocional.

Existen cinco partes de la inteligencia emocional que son las siguientes:

1.Autoconciencia emocional es la primera parte importante para desarrollar la Inteligencia emocional. Consiste en tomar conciencia de uno mismo y de sus emociones en cada momento. Saber lo que estamos sintiendo es importante porque sabremos tomar mejor todas las decisiones, no esperar a que las emociones lleguen a nosotros e ir nosotros a ellas, haciendo en cada momento lo que estamos sintiendo.

2.Manejo de las emociones. Manejar las emociones no es lo mismo que eliminarlas, las emociones nos hacen preferir entre unas cosas y otras y nos aportan instrucciones importantes a la hora de elegir. Pero tampoco se trata de hacerles caso ciegamente; recordemos que es muy importante el control que ejercen los glóbulos prefrontales sobre los impulsos. En definitiva las emociones y la razón deben de actuar como socios a la hora de impulsarnos por la vida.

 3.Motivación. La motivación tiene que ver con la forma de ver las cosas. Sin motivación no hay Inteligencia Emocional para desarrollar. Tener motivación significa ser optimista. 
La motivación y el optimismo son dos factores muy importantes en nuestras vidas. En la vida siempre hay obstaculos pero si tenemos motivación suficiente veremos estos obstaculos como oportunidades de mejora y crecimiento personal. Los pesimistas, en cambio, ven los problemas como fallos que ocurren dentro de ellos mismos. La buena noticia es que la adquisición del optimismo y la motivación se puede aprender.

4.Empatía. Es la capacidad de saber lo que sienten los demás sin que nos lo digan con palabras. La empatía es la base de la convivencia con los demás y del establecimiento de relaciones sanas. Por otro lado es importante destacar que la empatía es lo que impide que nos hagamos daño los unos a los otros. La empatía no tiene nada que ver con el coeficiente intelectual, la capacidad de empatia se debe a la amígdala, al cerebro emocional.

5.Habilidad social. Se trata del arte de las relaciones con los demás. Tiene que ver con el manejo de las emociones con los otros. Hay que tener en cuenta que cada intercambio con los demás podemos sentir al otro mucho mejor o mucho peor, por que se ha demostrado que nuestras emociones no se quedan en nosotros exclusivamente sino que nos traspasan e intentan entrar en los demás.